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Sant Jordi, patrón de Cataluña
Una de las novedades destacadas en Barcelona será la presencia de puestos de libros y rosas en las Ramblas en toda su totalidad: uno de los espacios más emblemáticos de la fiesta se recupera para la ciudadanía y la cultura.
"El reto de un Sant Jordi en día laborable"
La Cambra del Llibre de Catalunya, institución que agrupa a los gremios y asociaciones de editores, libreros, distribuidores y de la industria gráfica de Cataluña, pronostica un “Día del Libro y la Rosa” muy participativo dado el incremento de paradistas solicitantes en Barcelona y la consolidación de modelos en todo el país. Este año cae en día laborable por primera vez desde la pandemia.
La Cambra está convencida de que «la implantación de unos espacios dedicados al libro y la rosa ha sido clave para la racionalización de la fiesta, en parte de las mejoras en seguridad, eficiencia y servicios; y para asumir el crecimiento que ha experimentado el Día del Libro y la Rosa y la fiesta de Sant Jordi en conjunto, desde hace unos años, tanto de oferta como de público, y especialmente en grandes ciudades como Barcelona. Por lo tanto, el objetivo es hacerlo de la forma menos densificada posible y cada vez más distribuida en barrios». Esto precisamente permitirá «asumir con todas las garantías el reto de organizar una fiesta de asistencia masiva en un día entre semana y, por lo tanto, una gestión más compleja dado el aumento de los desplazamientos derivados de la actividad ordinaria de trabajo, escuela, comercio, etc.».
Como es habitual, aunque la fiesta se celebre el día 23 de abril, los efectos en las librerías comienzan a notarse unos días antes en forma de incremento de la asistencia de público en los establecimientos, por lo que en algunas poblaciones se montarán puestos frente a las librerías los días previos a Sant Jordi.
Jordi Ferré, representante de la Cambra del Llibre, hace un llamamiento para disfrutar del día en todo el país y subraya «el enorme esfuerzo de los agentes de la cadena del libro –editores, libreros, impresores y distribuidores– para hacer posible que todo el mundo pueda tener el libro que desea, tal como demuestran las cifras de los distintos títulos que se venden ese día».
Por otra parte, el presidente del Gremio de Llibreros, Èric del Arco, constata «la ilusión con la que viven cada año esta jornada los libreros, tanto a nivel individual como colectivo» y reivindica, en un día tan especial, «su papel de conocedores y prescriptores de los libros, todos los días, a lo largo del año, y al servicio de su entorno de proximidad». Del Arco cree que este año, al caer en un martes laborable, «la jornada será más local y repartida por todo el país, ya que la gente lo celebrará en su lugar de residencia o trabajo habituales».
Desde el Ayuntamiento de Barcelona, el Sr. Xavier Marcé, ha declarado que «consolidamos el modelo de un Sant Jordi repartido por toda la ciudad, de la Rambla a la Biblioteca García Márquez. El Ayuntamiento se desvive para hacer vivir un Sant Jordi popular y con protagonismo para los profesionales del libro y la flor».
Por su parte la Consellera de Cultura de la Generalitat de Catalunya, la Sra. Natàlia Garriga ha expresado «Sant Jordi es la gran fiesta de Catalunya. Si nos la tuviéramos que inventar, ¡no la podríamos hacer mejor! Encaramos este año llenos de ilusión para que la dinámica continúe siendo tan buena como la del año anterior.»