El salto desde el cómic en papel al cine.....

  • 126 años o más de cómic

  • Personajes mundialmente conocidos

  • La clave de siempre son las ilustraciones y dibujos

  • La complejidad actual, movimiento, sonido, música, voces y ritmo

De la historia del cómic han nacido centenares de personajes conocidos mundialmente, como Tintín, Spider-Man o Astèrix, para mencionar solo algunos. Para las generaciones más jóvenes, pero, estos personajes parecen pertenecer más a la pantalla que no al papel, y es que el cómic, como la literatura, también ha dejado una gran huella en la industria del cine.

¿Cómo y cuando apareció el cómic?

En realidad no hay una fecha clara al respeto, pero sí que hay cierto consenso en que todo empezó con la introducción de la imprenta y la caricatura. A pesar de que a principios del siglo XIX ya existían las tiras cómicas, no fue hasta el año 1896 que no se publicó el considerado como el primero del género; era The Yellow Kid in McFadden’s Flats (El chico amarillo), de Richard F. Outcault, e incorporaba una novedad clave: el globo.

También se comenta que el cómic nació al mismo tiempo que el cine, y que ambas formas de arte han ido evolucionando por caminos diferentes partiendo de un concepto en común: la imagen y la ilusión del movimiento. Quizás por eso, las adaptaciones de cómics nos parecen más modernas que las de los cuentos clásicos o las de novelas literarias.

Sin embargo, que el cómic tenga imágenes y sea más moderno que la literatura, no facilita su salto a la pantalla: adaptar el lenguaje icónico del cómic para el cine (lenguaje audiovisual) es un ejercicio tan complejo como hacerlo de un libro sin ilustraciones. Tal como menciona el guionista de cómics y director de cine, Óscar Aibar: «La gente se piensa que es más fácil porque son dibujos, pero es tan complicado como adaptar una novela, un cuento o cualquier otra cosa. No tiene absolutamente nada a ver la imagen en movimiento, imagen real, con el que es un cómic».

Por su parte, Benjamin Renner, codirector del malvado zorro feroz (2017), también hizo referencia a las dificultades que observó durante la adaptación de su cómic para la película: «[...] Creo que todos los escritores de cómics que se han enfrentado a la animación se habrán dado cuenta: en un cómic, es el lector quien da el ritmo con su lectura, y puede acelerar más o menos si en un momento le gusta. En este sentido, crea su propia película. [...] En la animación, en cambio, tienes que imponer un ritmo a todos los espectadores y poner voces a los personajes que el lector se había imaginado dentro de su cabeza».

En efecto, el arte audiovisual siempre añade complejidad a la obra, puesto que se suman otros sentidos y parámetros: el movimiento, el sonido, la música, las voces, el ritmo… A pesar de todo, la intención de la mayoría de adaptaciones va más allá de la traducción de un lenguaje a otro; el verdadero propósito es, en muchos casos, sacar el máximo provecho a la popularidad de los personajes de los cómics y a la riqueza narrativa del noveno arte.

Del còmic al cinema - CaixaForum

El Universo del Cómic

Nos encontramos en la edad de oro de las adaptaciones de cómics de superhéroes, pero el universo del cómic tiene muchos más géneros y variaciones en cuanto al formato, las temáticas y los orígenes. Desde las sencillas tiras cómicas hasta las elaboradas novelas gráficas, el cómic se ha desarrollado a partir de tres escuelas principales: la europea, la americana y la japonesa.

Los clásicos europeos

La escuela europea se caracteriza para crear cómics con un dibujo muy detallado y unas historias muy trabajadas, a veces con contenido incluso filosófico. Dentro de esta, la industria franco-belga es la que ha marcado casi todas las tendencias gráficas y nos ha regalado los personajes más míticos de la historia del cómic, como por ejemplo Tintín (Las aventuras de Tintín), Astèrix y Obèlix (Astèrix el galo), Los Pitufos o Lucky Luke.

Se trata de personajes con un gran recorrido en pantalla, empezando por las populares series y películas de animación tradicional, hasta las adaptaciones más modernas hechos con ordenador en Las aventuras de Tintín: El secreto del Unicornio (2011), o Los Pitufos 3 (2017); pasando por películas con actores de carne y hueso en el caso de Astérix y Obélix: Contra César (1999), Misión Cleopatra (2002), en los Juegos Olímpicos (2008) o Al servicio de su majestad (2012).

Así como propuestas que combinan personajes en 3D con actores reales, como ocurre con la primera y segunda parte de Los Pitufos (2011 y 2013).

Los superhéroes norteamericanos

Superman, Batman, Spider-Man, Wonder Woman, Thor, la Capitana Marvel, el Capitán América, la Linterna Verde… La lista de superhéroes y superheroínas llamados a salvar el mundo es muy larga. La escuela americana del cómic nace en Norteamérica y destaca para ser cuna de todos estos personajes, y de todas las películas que se han producido a su alrededor.

Pero del otro lado del océano también provienen otros clásicos inolvidables que consolidaron su fama a través de la pantalla, como Popeye el marinero, Snoopy o Garfield.

El cómic americano acostumbra a explicar historias cargadas de acción: policíacas, épicas y de aventuras. En el mundo de la adaptación cinematográfica de este género destacamos, para los más jóvenes, películas como: Scott Pilgrim contra el mundo (2010), Tortugas Ninja (2014), Guardianes de la galaxia (2014) o Spider-Man: un nuevo universo (2018)..

Del comic al cinema del anime japones

El manga japonés

Al Japón utilizan la palabra «manga» para referirse al cómic en general.

Las series y películas de animación, en cambio, reciben el nombre de «animo», y su evolución y popularidad ha estado paralela a la del manga. Aun así, son muchos los cómics japoneses que, en parte gracias a su salto a la pantalla, han llegado a muchas casas y generaciones de nuestro país.

Algunos de ellos son: Doraemon (1969), Bola de Dragón (1984), Shin Chan (1990), Sailor Moon (1991) o Sakura, la cazadora de cartas (1996)..

 "Superlopez" del còmic al cinema

Adaptaciones autóctonas

A pesar de que forma parte de la escuela europea, el panorama del cómic nacional también merece una mención especial. Capitán Trueno, Mortadelo y Filemón, Zipi y Zape o Superlópez son algunos de los títulos más importantes del cómic español, de los cuales tampoco nos ha faltado sus adaptaciones para el cine, con entregas como: La gran aventura de Mortadelo y Filemón (2003), Mortadelo y Filemón. Misión: Salvar la Tierra (2008) o la última adaptación en 3D, Contra Jimmy el Cachondo (2014). Así como las de Zipi y Zape, en El club de la canica (2013) o La isla del capitán (2016); o la del héroe torpe, Superlópez (2018), entre otros

Fuente, texto e Imágenes: CaixaForum/petits Cinèfils
Imágenes-gráficas: Capital2020