Agosto ya ha comenzado y, con él, las altas temperaturas. Una gran parte de viviendas en las ciudades de Catalunya tienen aires acondicionados instalados para mejorar el confort del hogar.
Pero muchas otras no lo tienen, especialmente cuando estas son segundas residencias o veraniegas, lo que hace que, año tras año, suframos las consecuencias del calor. Para todos ellos, hay una serie de consejos para enfriar la casa en verano, que puedes aplicar en cualquier momento para reducir la temperatura y pasar más cómodo esos días de calor extremo.
Baja las persianas de la casa en las horas de mayor calor
Durante el día, tener las persianas y ventanas abiertas hará que la vivienda absorba todo el calor del exterior, lo que aumentará la temperatura de manera significativa, especialmente en las horas en las que la casa recibe la luz directa del sol.
La orientación de la vivienda tiene mucho que ver. No es lo mismo una vivienda con orientación este, que recibe todo el calor por las mañanas, que una casa con orientación oeste, donde el calor hará acto de presencia a eso de las 3 de la tarde.
En cualquier caso, siempre es recomendable cerrarlas por la mañana y no abrirlas, al menos, hasta las 7 de la tarde.
Aprovecha las corrientes de aire
Por la noche, cuando el sol haya caído, es momento de abrir todas las ventanas de la casa. Así puedes aprovechar las corrientes de aire que se puedan generar, refrescar la casa y dormir de una forma mucho más cómoda.
Si esto no fuese suficiente, puedes complementar estas corrientes con las que se generan a través de ventiladores u otros sistemas similares.
El objetivo es que el aire se mueva, refrescando el ambiente y reduciendo la temperatura de la mayor parte de estancias del hogar.
Consume verduras y hortalizas crudas, y evita cocinar con vapor u hornos
En verano, las comidas frías son más habituales que durante otras épocas del año.
Empezar con un gazpacho, es una forma de refrescarnos y de hacer la digestión de una forma más ligera.
Pero, además, ayudan a reducir la temperatura de la vivienda, porque no se cocina a altas temperaturas en hornos u ollas de vapor, que aumentan el calor en la cocina.
En cualquier caso, si quieres cocinar otras comidas, deberías utilizar una campana extractora para expulsar el calor que se acumula de las placas de gas o las eléctricas al cocinar, lo que ayudará a reducir la temperatura de la casa.
Y una cocina o parrilla en el exterior puedes aprovecharla.
Utiliza un sistema de iluminación que genere poco calor
Aunque en verano hay más horas de luz, en algunos momentos hay que encender las luces de la vivienda.
Por eso, y aunque los focos halógenos están prohibidos desde el año pasado, puede ser buen momento para cambiarlos por bombillas LED o de bajo consumo si todavía no los hemos sustituido.
Este tipo de bombillas desprenden mucho menos calor, además de ser más eficientes desde el punto de vista energético y, por supuesto, para reducir la factura de la luz.
En cualquier caso, siempre es recomendable no tener las luces encendidas.
Riega el suelo de la terraza, del jardín o del balcón para enfriar tu casa
Si tienes una terraza o un balcón, puedes utilizar una pequeña manguera para regarla, mejor durante la tarde o la noche.
Es una manera de bajar la temperatura del ambiente y, de paso, refrescarte tú directamente.
Evidentemente, los jardines, al ser un elemento de la vivienda que necesita ser regado de forma abundante y constante, refresca bastante las viviendas.
Si tienes flores o plantas o incluso un huerto urbano en tu vivienda o en el balcón, lo más probable es que tengas que regarlas. Y cuando lo haces, estás refrescando la atmósfera cargada del exterior, ya que reduces la temperatura de la fachada exterior.
Y si no tienes plantas, es buen momento para llenar tu casa de ellas. Las de interior exigen unos cuidados determinados, pero si quieres refrescar realmente la temperatura, lo mejor es apostar por plantas trepadoras, como hiedra o un jardín vertical, ya que aíslan mucho mejor el calor.
Utiliza tu espacio de manera inteligente
La falta de aire acondicionado agudiza el ingenio durante el verano.
Por eso hay mucha gente que, durante la época estival, acondiciona el sótano o las habitaciones más frescas de la casa para vivir de manera temporal.
El motivo es que las estancias de la vivienda más bajas son las más frescas, ya que el calor tiende a subir a las plantas más altas. Evita estar bajo tejados de origen plástico o metálico.
Por eso, en verano, es mejor que estés el mayor tiempo posible en las habitaciones más frescas. Si la orientación es este u oeste, puedes permanecer en las estancias contrarias durante las horas de más calor, que serán las que estén más frescas en ese momento.
Enciende los electrodomésticos por la noche
Aunque pueda parecer que no tiene incidencia en la temperatura de la vivienda, los electrodomésticos también desprenden calor durante su uso y pueden afectarte en una ola de calor.
Por eso, es mejor encenderlos por la noche, cuando la casa ya esté ventilada y más fresca que durante el día.
Además, dependiendo del tipo de tarifa que tengamos contratada, encender los aparatos eléctricos por la noche es mucho más barato que por el día. En este sentido, puede ser buen momento para empezar a acostumbrarnos a encenderlos por la noche, y no por el día.
Viste tu casa de verano, cambia la decoración
La época estival es ideal para cambiar la decoración del mobiliario.
Es momento de guardar las alfombras y los cojines de los sofás, de cambiar las sábanas de las camas por unas de algodón o de vestir los edredones más frescos.
Una gran parte de los colchones fabricados en los últimos años, tienen una parte para invierno y otra de verano, así que es buen momento de darles la vuelta.
Ten en cuenta también que los de viscoelástica, por su configuración, retienen el calor corporal y generan una mayor sensación de calor. Hay complementarios muy delgados que puedes colocar encima y recubrirlos para lograr más frescor.
Y Finalmente una buena limonada o un té helado……
Aunque son bebidas para cualquier época del año, el abusar un poco de ellas, nos ayudará a refrescar la temperatura de nuestro cuerpo.
Esta limonada casera y natural es una receta facilísima y súper refrescante, obtendremos un litro y medio:
- 5 limones grandes troceados y sin semilla
- 700 gr de cubitos de hielo.
- 700 gr de agua.
- Ponemos todo en una batidora, trituradora o licuadora, medio minuto y cernimos el resultado, retirando la pulpa y quedará solo la refrescante limonada.
- Agregaremos el azúcar o edulcorantes a gusto.
¡¡¡Y a refrescarnos!!!
El té helado, hoy los hay en el mercado, por completo naturales, que simplemente es servirlos.
Si queremos prepararlos nosotros, podemos optar por té verde, blanco, de frutas, etc…, En este caso para elaborar un litro y medio:
- Herviremos los 700 gr. de agua con unas 5 o 6 cuchadas del te preferido. Dejaremos que se enfríe.
- Luego agregaremos los 700 gramos de cubitos de hielo,
- El zumo de un limón, una ramita de menta fresca. Y mezclaremos todo
- Agregaremos el azúcar, azucar moreno o edulcorantes a gusto.
¡¡¡Y a refrescarnos!!!